¿Cuál será su legado?

Hace años, durante una visita a la ciudad de Nueva York, vi una camiseta que decía: “El que muere con más, gana”. Me pareció jocoso entonces, pero ahora me pongo a pensar que aunque todos leemos sobre personas que juzgan su éxito a partir de la riqueza acumulada, el problema radica en que las posesiones materiales con
frecuencia no traen felicidad; siempre habrá alguien que ha acumulado más.

La mayoría de nosotros desea una vida cuyo valor se mida por las obras realizadas. En el caso de muchos rotarios, las obras realizadas por sus compañeros los inspira a prometer contribuciones a nuestra Fundación Rotaria que perdurarán más allá de sus vidas. Los ingresos de estos aportes se destinan al Fondo Anual para Programas año tras año. ¿Qué mejor legado al mundo?

Ya este año teníamos casi 8.000 compromisos al Círculo de Testadores, con un valor aproximado de u$s 338 millones, una gran proporción de los $ 700 millones en activos y aportes esperados al Fondo Permanente.

El primer presidente australiano de R.I., Angus S. Mitchell (1948/49), previó la creación del Fondo Permanente en 1992, en un discurso que terminó con esta historia del Talmud: Choni Hama’agel vio a un anciano sembrar un árbol de algarroba y preguntó cuándo daría fruto: “En 70 años”, le respondió. “¿Qué?”
dijo Choni. “¿Esperas vivir 70 años y comer de ese fruto?” “No encontré el mundo desierto cuando entré a él”, dijo el anciano. “E igual como mis padres sembraron antes de yo nacer, yo siembro para los que vendrán después de mí”.

Todos tenemos la misma oportunidad, si dejamos un legado a La Fundación Rotaria. n

William B. Boyd
Presidente del Consejo de Fiduciarios de LFR