Higiene mental...

Desde niño por exigencias o por alguna buena razón, mi madre Elisa, procuraba que todo aquel escrito que llegara a mis manos, lo leyera. Mi madre era concertista de piano, el primer piano que llegó desde Europa hasta la ciudad de Iquitos en la amazonía peruana fue para mi madre, un obsequio de la abuela doña Toribia.

Los muchachos, los jóvenes de la época, no teníamos el dinero para comprarnos cada uno un libro. Comprábamos uno solo y lo leíamos por turno. Así crecimos leyendo y leyendo en aquella época en laque no teníamos radio, televisión, ni siquiera teléfono.

A los 32 años de edad me invitaron a formar parte de un pequeño grupo para formar y fundar el Rotary Club de Pucallpa-Perú , siendo su primer secretario y del que aprendi mucho. Sobre todo el comportamiento y el modo y la forma de dirigirse al auditorio,

Durante mas de 80 años mi vicio fue la lectura sobre todo los diarios de mi ciudad, de la capital y también revistas llegadas de la Argentina o de Chile.

Estamos en vísperas del año dos mil 12 y el 10 de agosto estaré cumpliendo 87 frescos, juveniles y alegres años. Espero, vanidosamente celebrar mi centenario con la lucidez que gozo. Pero, por higiene mental y por decisión propio desde hace solamente una semana no leo mas diarios, mas periódicos y no veo los noticieros de la televisión Y lo hago por higiene mental.
Todos dicen comentan y escriben lo mismo. La competencia es increíble para darnos qué... me reservo la opinión.
Y me siento pleno, feliz, si hay uno que otro programa cultural con alguna orquesta sinfónica pues me prendo de ella y por supuesto los mejores partidos de futbol. Ya los míos no atraen hay que buscarlos fuera de mi país.

Me siento bien y espero que esta higiene mental sin diarios, sin revistas sin noticieros perdure por muchos años. Todos los que qu9ero y deseo vivirlos sin estresarme mas.

Con sincero aprecio y afecto deseando a todos aquellos que quieran leer estas pocas líneas una muy feliz navidad de paz y amor y un prospero año dos mil doce trabajando menos y ganando mas.

Un grande abrazo desde la amazónica ciudad de Pucallpa-Perú - D. 4300